No han podido desaparecernos ni por extenuación, ni con los atentados mortales fallidos ya más de tres veces, ni lograrán acallarnos.
Aquí permaneceremos diciéndole al mundo lo reprobable que acontece en este nuestro Veracruz, y en todo México, lugares donde la actividad periodística está considerada como la más peligrosa a la que cualquier persona se pueda dedicar. Por favor clicke aquí, para leer la nota…
-